Consejos para el fomento de la lectura.
Existe numerosa documentación y estudios referentes a la importancia de fomentar la lectura entre nuestros jóvenes. Cada tres años nos despertamos con noticias relativas al nivel alcanzado por los estudiantes chilenos en las pruebas Pisa, con multitud de expertos que vuelven a realizar análisis comparando la situación de nuestro país con su entorno y el resto del mundo. En este artículo no entraremos a analizar los datos macro y las políticas oficiales, ya muy trabajadas y discutidas, sino que trataremos de entregar algunos consejos y sobre todo recursos y herramientas prácticas que sean útiles para nuestros colegios y familias.
¿Cómo podemos fomentar el amor por la lectura de nuestros niños, niñas y jóvenes?
Esta es una pregunta compleja porque no existen herramientas mágicas que funcionen con todos nuestros estudiantes. Lo ideal es tratar de maximizar las posibilidades de que interaccionen con material escrito y sobre todo entiendan lo estimulante y gratificante que puede ser leer. Aquí te entregamos algunos consejos:
Para colegios:
- Elige contenidos que sean variados y que atraigan la curiosidad natural de los niños. Conversa y favorece el intercambio de información para conocer cuáles son sus gustos e intereses. Es importante la lectura informativa pero quizás lo es más la placentera o recreativa que será la chispa de un futuro hábito lector. El mejor predictor de una futura buena comprensión lectora es leer por placer.
- Trata de que las actividades relacionadas con las lecturas no sean tediosas para que el estudiante no asocie la literatura a un trabajo pesado. Quizás es mejor investigar la vida de un autor o sus referencias en cine, música o teatro a una simple síntesis de contenido.
- Fomenta las actividades complementarias en la biblioteca. Eso hará que los niños sientan que es un espacio para sentirse bien y no lo vean como un lugar extraño. Nunca uses la visita a la biblioteca como un castigo o algo negativo.
- Si el establecimiento en donde se encuentra el estudiante tiene todas las condiciones necesarias -útiles escolares, libros de texto, libros de lectura, libros en el idioma materno, refacción escolar-, fomentarán más oportunidades para que el estudiante esté más involucrado en la lectura.
- Intenta fomentar el carácter lúdico de la lectura realizando acciones que fomenten el carácter social de la misma. Juegos, clubs de lectura, bitácora por grupos, diarios lectores o charlas con autores, todas esas actividades te ayudarán a que pongan en común intereses y vean la literatura como algo enriquecedor.
- Es muy importante conseguir que las familias se impliquen en esta tarea. Intenta que las actividades que los estudiantes tengan que realizar cuenten involucren a la familia para fomentar la comunicación y la interacción de intereses y gustos literarios.
Para familias:
- Los hogares que cuentan con acceso a libros tienen más posibilidades de fomentar el hábito de la lectura en los niños. Si es posible, trata de acercarlos a la literatura e involúcrate en despertar su interés, los libros no deben asociarse solo al ámbito escolar.
- Puedes incluir contenidos digitales e interactuar a través de cuentos, diarios, recetas, comics, etc. Existen muchas herramientas gratuitas que te presentamos al final de este capítulo y que cuentan con recursos motivadores (video, audio, imágenes, etc.).
- Permite también que tus hijos elijan qué quieren leer. Es muy importante no ser crítico con sus gustos y dejar que disfruten del hábito sin que la temática sea un problema. Leer una revista sobre videojuegos también desarrolla su comprensión y agilidad lectora. Es muy importante abrir espacios de comunicación para que los niños expliquen sus lecturas, eso hará más sencillo conocerlos y recomendarles otros contenidos.
- Muchas familias creen que sus hijos no quieren leer porque solo se les presentan un tipo de género literario. Recuerda que hay niños a los que les gustan las novelas, pero también existen los comics, el teatro, los libros divulgativos y una infinidad de opciones y formatos (revistas, diarios, webs, cuentos cortos, etc).
- A la hora de elegir libros además de contar con sus intereses, y no obligar sino proponer, es muy interesante apoyarse en series de libros donde hay una continuidad en los personajes. El éxito de sagas como Harry Potter o el Señor de los anillos son buenos ejemplos de cómo conseguir que la lectura se transforme en un hábito.
- Fomenta las visitas a espacios de lectura, la interacción con el cine y la música y cualquier otra actividad que ponga a la literatura en un contexto cotidiano. Hablar sobre cuentos y libros ayuda a socializar el placer de leer.