Recomendaciones para un uso adecuado de la tecnología.

Por Francisca Danker, Psicóloga Infanto-juvenil.

Nuestros niños y adolescentes han nacido, crecido y están siendo criados en un mundo globalizado, tecnológico y cambiante. Esto permite que los podamos denominar “nativos o ciudadanos digitales”, sin embargo, eso no los hace conocedores y expertos en cómo desenvolverse en un mundo digital de forma segura y responsable. Así como nosotros tampoco nacimos sabiendo cómo ser ciudadanos en nuestras comunidades.

Es por esto que debemos educar a nuestros hijos/as incorporando la tecnología como parte de la rutina y enseñando además el uso adecuado de los medios digitales, sacando el mejor provecho de estas y considerando siempre los riesgos que implica.

Algunas sugerencias:

Intenta un balance entre las distintas actividades: actividad física, tiempo con niños y niñas de su edad, momentos en familia, momentos de juego, lectura, hábitos de estudio y uso de tecnología. Es fundamental establecer reglas que se cumplan entre todos los miembros de la familia. Cuándo se puede utilizar la tecnología, por cuánto tiempo y qué aplicaciones se pueden utilizar.
Considera y respeta el rango etario establecido para las distintas aplicaciones, juegos, vídeos y contenidos que consume tu hijo/a en los dispositivos tecnológicos. Favorece el consumo de contenidos pedagógicos e involúcrate en lo que están observando. En la siguiente página https://www.commonsensemedia.org/es/latino puedes revisar las reseñas de aplicaciones, juegos, películas y contenidos de forma gratuita. Además cuenta con artículos para padres, actividades para realizar en familia y un completo programa para educar ciudadanos digitales.
Instala controles parentales en los distintos dispositivos. La función principal de un control parental es que los usuarios accedan sólo a contenidos apropiados para la edad, sin embargo, poseen un sin número de otras facultades como controlar el tiempo en pantalla, acceder a los contenidos visualizados, evitar los fraudes por internet, regular la descarga de aplicaciones, entre otras.
Convierte el momento del uso de la tecnología en un espacio social. Observa y comparte con tu hijo/a mientras juega u observa contenidos en internet, hazle preguntas, muestra curiosidad y trata de establecer asociaciones entre lo que está consumiendo online y la vida real.
Evita el uso de dispositivos mientras se están realizando otras rutinas. Por ejemplo, no utilices la televisión o el celular al momento de comer, para dormir, como ruido de fondo al estar realizando otra actividad, etc. Modela con el ejemplo, para tus hijos/as eres un referente. Los dispositivos deben quedar fuera de las habitaciones y se deben establecer zonas y momentos libres de tecnología.
Enseña a tus hijos/a cuáles son los resguardos necesarios para una navegación segura y responsable: no compartir información privada (direcciones, nombres completos, establecimientos educacionales, edad, números de teléfono, etc), no enviar ni publicar fotos personales, uso de contraseñas seguras, no hablar con desconocidos, no compartir ni publicar fotos de otras personas sin su autorización.
Reflexiona y refuerza en tus hijos/as que el internet es público y todo aquello que realizamos en internet deja una huella digital que no se puede eliminar y que queda de forma permanente. Pregúntale a tus hijos/as ¿Qué huella están dejando? ¿Qué huella quieres dejar?
Maneja los usuarios y contraseñas de tus hijos/as, conversa sobre ellos y establece que los dispositivos serán revisados cada cierto tiempo. Para los adolescentes esto puede ser tomado como una invasión a su privacidad, sobre todo por el uso de las redes sociales como medio de comunicación, sin embargo, es importante conversar con ellos y hacerlos reflexionar sobre la idea y el hecho fáctico de que el internet es público, por lo tanto, desde ahi no hay privacidad desde un comienzo. Refuerza la importancia de la comunicación presencial, especialmente ante temas “privados”.
No utilices la tecnología cómo regulador de emociones, es decir, evita que se calmen jugando con el celular o viendo una película.
Reflexiona con tus hijos/as sobre cómo esperas que se desenvuelven de forma digital. Muéstrales que esperas se comporten de la misma forma que lo harían en la vida offline, con los mismos valores y códigos de conducta. Pregúntales: ¿Harías esto en persona? ¿Dirías esto si esta persona estuviera al frente tuyo?
Evita utilizar el uso de la tecnología como refuerzo positivo o consecuencia, esto implícitamente entrega el mensaje de que la tecnología es un privilegio el cual merecen o no merecen. Lo que queremos lograr es que niños/as y adolescentes incorporen la tecnología de manera responsable y puedan autorregularse.